El
filósofo busca ofrecer una página web, donde no se fuerce a tener
que llevar a cabo una elección tan dura, entre la idea del sexo y la
virtud. Una pornografía en la que el deseo sexual está relacionado
con valores mucho más altos. Para este filósofo, la pornografía
más corriente, no se debería aceptar, ya que nos hace sentir como
si fuéramos animales o ser animales. Y, es que, según él, el porno
actual elimina todas las preocupaciones que una persona, que sea
razonablemente sensible, amable e inteligente, puede llegar a tener.
Así, según este filósofo el porno que encontramos Internet, por
que lo llena, nos hacer elegir, todos los días, entre los valores
pornográficos y nuestra verdadera sensibilidad: los valores que hay
que defender, a lo largo del resto del día. El pasado mes, el
Gobierno británico ha anunciado que iba a promover un conjunto de
nuevas medidas, para poder proteger a los niños del libre acceso a
la pornografía, a través de Internet. Si dicha propuesta saliera
adelante,. Los consumidores van a poder elegir si quieren que sus
hijos accedan a contenidos adultos, en el momento en que firma su
contrato de ADSL.
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