Es una moda que está de moda entre muchas parejas que quieren acabar con la rutina, tener un recuerdo vivo de su pasión o llevar una fantasía sexual a la realidad. Además, podemos disponer de la tecnología necesaria, en nuestra habitación, al alcance de nuestra mano… lo que hace que muchas parejas se animen. Incluso, algunas productoras de cine porno disponen de equipos para alquilar a las parejas, que quieran, puedan grabar su propia cinta porno, con los mejores resultados posibles. Normalmente, suelen rodarse en un hotel o en una casa alquilada; pero, si la pareja tiene suficiente presupuesto, se realiza en una playa o en el campo. Dentro del contrato se edita un video, se entregan las cintas originales y las fotos que se hayan tomado. Y, se firma un acuerdo que garantice la total confidencialidad y uso de dichas imágenes. Normalmente, es el hombre el que quiere grabar el video -como regalo de aniversario, cumpleaños o para dar un aire nuevo a la relación.
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